12 Seis días antes de la Pascua, Jesús fue a Betania, donde vivía Lázaro, a quien él había resucitado. 2 Allí hicieron una cena en honor de Jesús; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban a la mesa comiendo con él. 3 María trajo unos trescientos gramos de perfume de nardo puro, muy caro, y perfumó los pies de Jesús; luego se los secó con sus cabellos. Y toda la casa se llenó del aroma del perfume. 4 Entonces Judas Iscariote, que era aquel de los discípulos que iba a traicionar a Jesús, dijo:
5 —¿Por qué no se ha vendido este perfume por el equivalente al salario de trescientos días, para ayudar a los pobres?
6 Pero Judas no dijo esto porque le importaran los pobres, sino porque era ladrón, y como tenía a su cargo la bolsa del dinero, robaba de lo que echaban en ella. 7 Jesús le dijo:
—Déjala, pues lo estaba guardando para el día de mi entierro. 8 A los pobres siempre los tendrán entre ustedes, pero a mí no siempre me tendrán.
Juan 12:1-6
Este mensaje va a ser corto y directo, sin rodeos.
Esta «estrategia» de los traidores, usada para engañar: ha sido empleada desde hace mucho tiempo y por muchos, los más grandes traidores socialistas-comunistas como lo son: Fidel Castro, Lula da Silva, el Che Guevara, Hugo Chavez, Nicolás Maduro, Evo Morales y ahora lopez en México.
Todos estos hombres, empezando con Judas Iscariote, con la bandera de «ayudar» al pobre, han sido o son traidores, que por su ambición de dinero, entregan al amigo o se han enriquecido a costa de saquear al pueblo.
El que verdaderamente ayuda al necesitado, no lo anda anunciando con bombo y platillo y mucho menos, es capaz de compararse con Nuestro Señor Jesús, dador de todo lo que tenemos.
Ya estamos advertidos: No te dejes engañar por estos lobos vestidos con piel de oveja, falsos profetas que vienen como mesías a «salvar» al necesitado: son lobos rapaces, engañadores, que con SU “justicia social”, vienen a saquear al pueblo.
Quizá engañen a algunos con su labia, pero será solo durante un poco de tiempo, ya que no hay nada oculto que no haya de ser descubierto.
Pero de Dios nadie se burla, y El Señor dará a cada uno conforme a sus obras, NO CONFORME a lo que DICEN, sino a lo que HACEN.
5 Más por causa de[ tu terquedad y de tu corazón no arrepentido, estás acumulando ira para ti en el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios, 6 el cual pagará a cada uno conforme a sus obras: 7 a los que por la perseverancia en hacer el bien buscan gloria, honor e inmortalidad: vida eterna; 8 pero a los que son ambiciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia: ira e indignación. 9 Habrá tribulación y angustia para toda alma humana que hace lo malo, el judío primeramente y también el griego; 10 pero gloria y honor y paz para todo el que hace lo bueno, al judío primeramente, y también al griego.
Romanos 2:5-10
Es Dios mismo quién castigará a los que son ambiciosos, los que no obedecen la verdad y están a favor o apoyan la maldad, la pereza, la delincuencia; y no buscan arrepentirse, sino que con el remordimiento que sienten, buscan seguir justificándose, o acaban por suicidarse.
Algo que me llama mucho la atención de Judas, es que era discípulo de Jesús, andaba con Él: caminando, compartiendo la mesa, conociéndolo, viendo todo lo que hacía: sanando enfermos (algo que era prioridad para Jesús), multiplicando el pan, haciendo milagros, enseñando la Palabra de Dios… era DISCIPULO de Jesús, de los 12 escogidos. Y aún asi, era ladrón y traidor. ¿En qué momento permitió que el diablo entrara en él, en qué momento decidió traicionar a Dios mismo?
Por eso la misma Biblia nos advierte:
Por tanto, el que cree que está firme, tenga cuidado, no sea que caiga.
1 Corintios 10:12
Debemos orar sin cesar, en todo tiempo: orad y velad para no caer en tentación. Gracias a Dios por su paciencia con cada uno de nosotros, que sea siempre su vara y su callado que nos infundan aliento. Que la vara de la disciplina y el callado para volvernos al redil, jamás se aparte de nosotros.
Oremos para que primeramente Dios nos muestre nuestro pecado, que nos de el don de arrepentimiento para andar como Él quiere que andemos.
Y también, que nos llene de Su Espíritu Santo, para que podamos discernir estos espíritus engañadores, traidores, para estar alertas y no ser arrastrados a estas corrientes.
9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
1 Juan 1:9
Para recibir el perdón de Dios, y Su Misericordia, es necesario el arrepentimiento (no la auto justificación), ponernos a cuentas con Él, a través del perdón que Jesús nos da, yendo a la cruz, para tomar el lugar que nos correspondía.
Dios en nombre de Jesús, levante un libertador en México, un hombre de acuerdo a Su corazón, para guiar al pueblo en la libertad y abundancia que Cristo ha venido a darnos. Jesucristo sigue siendo El Señor de los ejércitos, y Él dará la victoria a Su Pueblo, a quienes tenemos nuestra confianza puesta SOLAMENTE en Él.
Por tu Encuentro con Jesús,
-Ani Garza T