Vivimos en un mundo donde muchas personas buscan guía espiritual a través de diferentes prácticas, como el tarot, que parece ofrecer respuestas rápidas a las preguntas de la vida. Sin embargo, como cristianos, debemos recordar que no todo lo que parece bueno a los ojos humanos es agradable a Dios.
“Hay camino que al hombre le parece derecho, pero al final, es camino de muerte.”
Proverbios 14:12
Dios nos ama tanto que nos advierte contra prácticas como la adivinación, el espiritismo y el tarot, porque sabe que estas nos alejan de Él y nos exponen a engaños espirituales. La Biblia dice claramente:
«No se hallará en ti nadie que haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni quien interprete señales, ni agorero, ni hechicero, ni encantador, ni médium, ni espiritista, ni quien consulte a los muertos. Porque cualquiera que hace estas cosas es detestable para el Señor.»
Deuteronomio 18:10-12
El tarot, como cualquier forma de adivinación, busca respuestas fuera de la voluntad de Dios y nos lleva a confiar en lo creado, en lugar de confiar en el Creador.
La historia de Saúl es una advertencia clara
En 1 Samuel 28, encontramos la historia del rey Saúl, quien consultó a una médium para intentar comunicarse con el profeta Samuel, después de que Dios dejó de responderle debido a su desobediencia. En su desesperación, Saúl desobedeció a Dios y buscó respuestas en el espiritismo. Esta decisión trajo graves consecuencias: fue rechazado como rey y terminó enfrentando su muerte.
Saúl es un ejemplo claro de lo que sucede cuando buscamos guía espiritual fuera de Dios. En lugar de hallar paz, nos acercamos a caminos que conducen al caos y la destrucción.
¿Quieres conocer la verdadera fuente de la guía espiritual?
Dios nos llama a buscarlo a Él, quien es la fuente de toda verdad y sabiduría.
«Amados, no crean a todo espíritu, sino prueben los espíritus para ver si son de Dios, porque muchos falsos profetas han salido al mundo.»
1 Juan 4:1
Esto significa que cualquier enseñanza o espíritu que afirma que Jesús es el Hijo de Dios encarnado, plenamente humano y plenamente divino, está alineado con el Espíritu de Dios. Este punto resalta la verdad del Evangelio: Jesús, siendo Dios, se hizo hombre
«Y el Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros (y vimos Su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.»
Juan 1:14
Negar esto es rechazar la esencia de quién es Cristo y Su obra de salvación.
En esto conocen el Espíritu de Dios: todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne es de Dios; y todo espíritu que no confiesa a Jesús no es de Dios; este es el espíritu del anticristo, del cual han oído que viene, y que ahora ya está en el mundo.
1 Juan 4:2-3
Esto incluye cualquier enseñanza, filosofía o creencia que niega que Jesús es el Mesías enviado por Dios o que contradice Su divinidad y humanidad. Este espíritu no solo se opone a Cristo, sino que también busca desviar a las personas de la verdad del Evangelio.
El término «anticristo» no solo se refiere a una figura futura específica, sino también a una actitud o influencia presente en el mundo, contraria a Cristo y Su verdad. Este espíritu ya estaba operando en el tiempo de Juan y continúa presente en diversas formas. Su propósito es claro: engañar, matar, robar y destruir.
El tarot y otras prácticas similares pueden parecer inofensivas, pero su origen y propósito no provienen de Dios. El enemigo siempre ha intentado imitar y distorsionar la verdad, ofreciendo atajos espirituales que parecen atractivos, pero que terminan siendo un lazo mortal.
Jesús nos invita a poner nuestra confianza solamente en Él:
«Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí.»
Juan 14:6
Dios nos ofrece algo mejor y un llamado a reconciliarnos con Él
Si has practicado el tarot o te has sentido atraído por este tipo de cosas, hay buenas noticias: Dios te ama y quiere que vivas una vida llena de Su paz y verdad. Él no quiere que te pierdas en engaños que solo traen oscuridad y separación de Su amor.
En lugar de buscar respuestas en las cartas, busca a Dios en oración y en Su Palabra. Como nos dice Jeremías 29:13: “Me buscarán y me encontrarán, cuando me busquen de todo corazón.”
Hoy puedes dar un paso de fe. Arrepiéntete y acércate a Dios con un corazón sincero. Su amor es tan grande que envió a Su Hijo, Jesús, para salvarte y darte vida eterna. En Él encontrarás la paz, la dirección y el propósito que estás buscando.
«Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonarnos los pecados y limpiarnos de toda maldad.»
1 Juan 1:9
Dios te ama profundamente y quiere que vivas una vida en comunión con Él. Abandona el tarot y cualquier práctica de adivinación, y entrega tu vida al único que puede guiarte con verdad y amor eterno.
Es indispensable la confesión de Cristo como el Hijo de Dios, encarnado para salvarnos. Cualquier enseñanza o movimiento que niegue esta verdad es engañoso y está influenciado por el «espíritu del anticristo». Por eso, debemos estar atentos y probar los espíritus, como se nos manda Dios en Su Palabra.
Esto también nos muestra la importancia de conocer la verdad de la Biblia y tener discernimiento espiritual, algo que el Espíritu Santo nos proporciona.
Pues si ustedes, siendo malos, saben dar buenas dádivas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan!
Lucas 11:13
Por tu Encuentro con Jesús,
-Ani Garza T