Salmo 119:105
En muchas ocasiones, por no conocer lo que Dios nos enseña en Su Palabra, la Biblia, podemos terminar realizando acciones que no solo desagradan al Señor, sino que Él mismo las considera abominables. Imagina lo terrible que sería estar practicando algo
que va en contra de los principios y valores que Dios nos ha revelado, sin siquiera ser conscientes de ello.
Por esto, es muy importante buscar la guia del Espíritu Santo y estudiar Su Palabra para evitar caer en prácticas que nos alejen de Su voluntad y nos aparten de Su amor y bendición.
«Que no sea hallado en ti nadie que haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni hechicería, ni practicante de magia, ni encantador, ni quien consulte a un médium, ni espiritista, ni quien consulte a los muertos. Porque todo el que hace estas cosas es abominable al Señor; y por estas abominaciones el Señor tu Dios desposeerá a aquellos que las practican delante de ti.» (Deuteronomio 18:10-12, LBLA)
En un mundo donde recibimos información y enseñanzas de todo tipo, nos podemos confundir entre lo que está bien y lo que está mal, las fronteras entre lo que es aceptable y lo que no lo es pueden parecer borrosas. Es fácil para aquellos que no conocen la Biblia caer en prácticas que van en contra de lo que Dios dice. La magia y la hechicería pueden parecer inofensivas o incluso atractivas, pero en realidad es algo que Dios abomina y pueden llevarnos por un camino peligroso.
En Isaías 55:6, leemos: «Buscad al Señor mientras pueda ser hallado, llamadle en tanto que está cerca.» Es importante buscar a Dios y seguir sus enseñanzas mientras tenemos la oportunidad de hacerlo, y eso es hoy. No es casualidad que hayas llegado a este mensaje.
La Palabra de Dios nos ofrece luz y guía en nuestro camino. En Salmo 119:105 leemos: «Lámpara es a mis pies tu palabra, y luz para mi camino.» Por lo tanto, es fundamental leer la Biblia y meditar en ella día y noche.
En Proverbios 3:5-6 «Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento. Reconócelo en todos tus caminos, y Él enderezará tus sendas.»
Es esencial que pongamos todos los libros a la luz de la Biblia y no al revés, permitiendo que la Palabra de Dios sea nuestra guía suprema en todo lo que hacemos y creemos.
Por tu Encuentro con Jesús,
-Ani Garza T