9 Yo soy la puerta; si alguno entra por mí, será salvo; y entrará y saldrá y hallará pasto.
Juan 10:9
En este pasaje podemos ver que Jesús es LA Puerta para ser salvo, no una de muchas puertas, sino LA PUERTA.
¿Por qué es importante reconocer esto? Simple, porque cualquier otra puerta por la que entremos, no nos dará la Salvación ni Vida Eterna.
Hoy hay muchas puertas que se abren prometiendo el Paraiso, pero Jesús es claro cuando Él mismo se define como LA PUERTA a la Salvación.
También aclara lo siguiente: