Por Ana Maria GT
Mayo 5, 2011
Es natural que cuando viene a nosotros el sentimiento de temor, tratemos de justificar que tenemos una razón real por lo cual estamos angustiados. Y la mayoría de las veces, sobre todo cuando no conocemos bien al Señor, encontramos razones reales del porque nos sentimos así. Y en vez de buscar el rostro del Señor y Su Palabra, confiando en que El tiene un propósito mayor para cada cosa que permite, insistimos en repasar los pensamientos que nos dan la razón para sentirnos angustiados y con temor.
Jesús mismo nos advirtió que en este mundo tendríamos aflicción, y no hay manera de escapar de esto, EN ESTE MUNDO y mientras estemos aquí, tendremos aflicción. Aún así, Jesus nos dijo que confiaramos en EL, porque el ya venció este mundo, y con EL también tenemos ya la victoria en cada situación. Hay muchas razones por las cuales podemos temer, y todo empieza con un pensamiento, le vamos dando vuelta y le damos rienda suelta a todo lo que pudiera suceder.
Quizá sea una experiencia del pasado, que cada vez que la recuerdas quedas atrapado como si lo vivieras en el presente. Pueden ser tantas cosas…. una mala experiencia en el colegio, una amiga que te lastimó, un socio que te defraudó y robó en el negocio, cuando te despidieron de tu trabajo, el engaño de tu cónyuge, el abandono de tus padres, el secuestro de algún familiar, un diagnóstico grave de enfermedad, etc. Y cada vez que recordamos ese incidente, pensamos que puede volver a suceder, lo repasamos en nuestra mente en cada oportunidad, y justificamos el sentirnos angustiados.
Puede también ser algo que este pasando en este momento y al parecer no se ve alguna solución. Quizá económicamente no se ve claro el como pagar las cuentas que vienen, puede ser un diagnóstico grave del médico sobre tu salud o alguno de tus familiares, quizá tu cónyuge te dice que se esta viendo y ahora se va con alguien mas, o te estas dando cuenta que tu hijo está metido en el alcohol, pornografía o las drogas, o te da la noticia que es gay, alomejor tienes algún familiar o amigo secuestrado, etc… Hay tantas razones para angustiarnos, y además autojustificar esa angustia, que nos perdemos de todas las bendiciones que Dios no ha venido a dar.
Jesús dijo que el había venido a darnos vida, y vida en abundancia, en todas las areas de nuestra vida. Es cuando venimos a su reino, en donde EL es el REY, en donde podremos experienciar esa abundancia de vida y gozo que Dios tiene para nosotros. En este mundo tendremos aflicción, y lloverá sobre todos, justos (por la sangre de Cristo) e injustos, la diferencia es la manera en que vamos a enfrentar las aflicciones.
Debemos saber que el príncipe de este mundo es satanás, quién ha venido a robar, matar y destruir, y Dios le ha dado cierto poder para actuar. También sabemos que los hijos de Dios, ya no somos de este mundo, sino embajadores de Cristo, quien nos sacó de las tinieblas a su luz admirable para anunciar sus virtudes. Y que como embajadores de Cristo, del reino de Dios, tenemos un propósito que cumplir mientras andamos aquí, que es por un corto tiempo a comparación de toda la eternidad que pasaremos con Él.
Aún asi, seguimos viviendo en este mundo con personas imperfectas, y teniendo aflicciones de todo tipo. Entonces, podemos tener temor? Es válido que sintamos temor y angustia? Si no fuera así Dios no nos hubiera dado esta Palabra:
No te lo he ordenado yo? Sé fuerte y valiente! No temas ni te acobardes, porque el Señor tu Dios, estará contigo dondequiera que vayas. Josué 1:9
Dios le dio esa Palabra a Josué cuando estaba a punto de conquistar la tierra prometida, y es una Palabra que hoy Dios nos da a cada uno de nosotros que confiamos en El. No importa la situación por la que estes pasando, el Señor tu Dios estará contigo!! Que mas queremos, que Dios, el Todopoderoso esté con nosotros. A El no le pasa desapercibida nuestra situación, y si lo esta permitiendo El tienen un propósito mayor. Esperemos y confiemos en EL, que EL hará.
Es en el temor, cuando nos sentimos angustiados, que buscamos pasar mas tiempo con Dios, y El nos responde, nos abraza y nos dice que no temamos, que El está con nosotros. Aprovecha este tiempo de temor o angustia para pasar mas tiempo con el Señor, busca su rostro para hablar con El y permite que te hable. Deja de buscar solamente sus manos para que te ayude, sino que busca su rostro para pasar mas tiempo con El. El jamás nos defraudará. Dile exactamente lo que te preocupa, y escucha su voz reconfortándote, hablale con sinceridad y hablale de esas luchas por las que estas pasando, El te comprenderá perfectamente bien, porque EL se hizo hombre y paso por todas las pruebas difíciles que se le presentaron, y en todas venció. Pídele a El su consejo, el sigue siendo el Admirable Consejero, Principe de Paz, Padre Eterno, Dios Todopoderoso. Nadie como El.
Mantengámonos confiados en El, no perdamos la fe, la cual mas preciosa que el oro y la plata necesita ser probada como por fuego. Es en los momentos difíciles en donde nuestra fe es probada, y Jesús sigue intercediendo por nosotros para que nuestra fe no falle.
Pero resistidle firmes en la fe, sabiendo que las mismas experiencias de sufrimiento se van cumpliendo en vuestros hermanos de todo el mundo. Y después de que hayais sufrido un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, que os llamó a su gloria eterna en Cristo, El mismo os perfeccionará, afirmará, fortalecerá y establecerá. 1 Pedro 5:9-10
El sufrimiento, el temor, la angustia, es solo por UN POCO de tiempo, porque el Dios de toda gracia nos perfeccionará y fortalecerá y estará con nosotros siempre, hasta el fin del mundo. Después de cada prueba, saldremos mas fortalecidos espiritualmente y podremos fortalecer a otros que estan pasando por la misma prueba. Ánimo que el Señor esta contigo!
No te lo he ordenado yo? Sé fuerte y valiente! No temas ni te acobardes, porque el Señor tu Dios, estará contigo dondequiera que vayas. Josué 1:9